• Expresa su solidaridad y cercanía con las Cáritas hermanas de la zona y abre una campaña de captación de fondos para ayudar a las víctimas
  • Cáritas habilita dos números de cuenta y una página web para recaudar fondos

La red Cáritas se ha movilizado rápidamente para coordinar su respuesta humanitaria urgente a los graves efectos de los dos terremotos de 7,8 y 7,5 grados en la escala de Richter que sacudieron el pasado lunes el sureste de Turquía y norte de Siria. Hasta el momento, los seísmos han causado más de 9.600 fallecidos y cientos de miles de heridos.

Ante esta dramática situación, Cáritas Diocesana de Orihuela-Alicante expresa su solidaridad y cercanía con Cáritas Turquía y Cáritas Siria abriendo una campaña de emergencia “Cáritas con Turquía y Siria” para canalizar la solidaridad de sus donantes de cara a ayudar a las víctimas de esta catástrofe natural.

Cuentas de apoyo

Cuentas bancarias disponibles para realizar donaciones poniendo en el concepto “Terremoto Turquía y Siria”:

Banco Sabadell ES66 0081 1490 7900 0101 5905

Banco Santander ES58 0049 2318 9419 1006 8400

Web de donaciones: https://caritasoa.org/emergencias/caritas-con-turquia-y-siria/

Situación dramática

 “La preocupación que nos transmiten tanto desde Cáritas Turquía como desde Cáritas Siria es el elevado número de personas que han perdido sus casas en pleno invierno. Los terremotos les sorprendieron mientras dormían y salieron a la calle con lo puesto a pesar de que la temperatura estaba bajo cero”, explica Carmen Gómez de Barreda, del equipo de Cooperación Internacional de Cáritas Española.

La respuesta humanitaria de ambas Cáritas se está centrando precisamente en abrir canales de escucha para facilitar información a los afectados sobre espacios de refugio. En el caso de Turquía, la región más afectada es la Diócesis de Anatolia. Su catedral, en la ciudad Iskenderun (al sur del país), se derrumbó totalmente y las oficinas y espacios de Caritas sufrieron fuertes daños.

“Caritas Anatolia, en coordinación con las autoridades, está reuniendo a las personas desplazadas en espacios abiertos y seguros y tratando de distribuir algunas comidas calientes y ropa. Las diócesis de Izmir y Estambul están apoyando y recolectando materiales para enviar ayuda a la Región de Anatolia”, explica Carmen Gómez de Barreda.

En el caso de Siria, el terremoto profundiza el drama de un país que arrastra desde más de una década una guerra civil que ha dejado medio millón de muertos y 6,6 millones de refugiados. “La primera respuesta está centrada en habilitar centros de refugio para dar cobijo a las personas que han perdido sus casas. Además, se está facilitando comida y sobre todo abrigo, ya que las personas han huido de sus hogares con lo puesto”, subraya Bárbara Lorenzo, del equipo de Cooperación Internacional de Cáritas Española.

Las oficinas de Cáritas Siria en Alepo y Latakia sufrieron graves daños, y gran parte del personal, así como 4.500 familias afectadas, duermen dentro de edificios religiosos o en sus automóviles, debido al clima particularmente severo. Caritas Siria está movilizando personal y voluntarios de Damasco y Homs, y está realizando una evaluación de las necesidades para implementar una respuesta rápida.

Ante el devastador impacto de los terremotos, las Cáritas nacionales que operan en ambos países han alertado sobre las dificultades que tienen en el terreno para recibir y distribuir ayuda en especie. “La ayuda en especie es muy complicada, por lo que se prioriza la entrega de efectivo”, precisa Bárbara Lorenzo.