Xàbia vuelve a ser cristiana. La llegada del fin de semana trae consigo la recta final y más intensa de los Moros i Cristians de Xàbia con los Desfiles de Gala. La fiesta recreó anoche el acto de Reconquista Cristiana por el que el bando de la cruz recupera la identidad originaria de la villa.
Tras siglos de asentamiento del pueblo mahometano, las tropas cristianas regresaron anoche reclamando su territorio y su antigua fortaleza que se había convertido en un palacio rodeado de jardines y aljibes tras la conquista árabe. En esta ocasión, las huestes moras advirtieron la enfurecida llegada de las tropas cristianas y, rápidamente, comenzaron a proteger su plaza con el disparo de arcabucería. Sin embargo, la sed de venganza de los antiguos moradores del castillo era enorme y rápidamente, la morisma de replegó dentro de las murallas.
La representación atrajo a numeroso público local y foráneo que disfrutó de la encarnizada lucha interpretada por el grupo Legend y la batalla dialéctica entre los embajadores moro y cristiano, Josep Vicent Miralles y César Rodríguez.
El grito de “¡Xàbia es cristiana!” señala la llegada de los Desfiles de Gala. Una esperada cita en la que cada una de las filaes exhibirá sus mejores trajes en un espectáculo que combina colorido, música, alegría y fantasía que, si bien el sábado vivirá su primera gran jornada, la del domingo promete sorprender con el boato de la Capitanía Almoriscos que, hasta el momento, se guarda en absoluto secreto.
No obstante, a los Desfiles de Gala hay que sumarles otros muchos actos. Hoy sábado la Capitanía visitará todas las kábilas y cuarteles en un acto de hermandad festera y por la tarde -previamente al Desfile- se celebrará la Entrada de Bandas de Música en la avenida Jaime I. Por la noche habrá macrodiscomóvil.
El domingo tendrá lugar la solemne eucaristía en honor a Sant Jaume y en memoria de todos los festeros difuntos. Luego, antes del último desfile, las bandas de música volverán a desfilar por la avenida Jaime I para finalizar interpretando al unísono el pasodoble “Xàbia” bajo la batuta de Miriam Llerena. Tras el paso de la Capitanía y como fin de fiesta se disparará un mascletà nocturna desde La Grava.