- Este ejemplar de 26,24 metros de altura y de más de 350 años es candidato a este galardón de la ONG Bosques sin fronteras
Biar (Alto Vinalopó), tiene un árbol de más de 350 años y es uno de los nueve candidatos a ser Árbol de España 2023, que organiza la ONG Bosques sin Fronteras.
Este árbol ha pasado por una selección previa ante un jurado, que ha decidido que él de Biar esté dentro de una votación popular, contra otros ocho árboles.
El Plátano de Biar se enfrenta contra el Encina del Monte de la Redonda de Colindres (Cantabria), el Castaño del Tio Trazas de Los Santos (Salamanca), el Carballo de Santa Margarita (Pontevedra), el Olmo de Montaña de El Rastrillo de Cameros (La Rioja), el Carballo De Gregorio (A Coruña), el Carbayón de Cornellana (Astuarias), el Pino Gordo de Vilaflor de Chasna (Santa Cruz de Tenerife), el Moral de Villoviado (Burgos). Además dentro de la votación, también buscan el Bosque del Año de España, donde participan solo dos bosques del país, como el Hayedo de Montejo de la Sierra (Madrid) o el Bosque de la Abundancia de Orea (Guadalajara). Ahora se enfrentan a una votación popular para conseguir este galardón y optar así a ser el candidato a Árbol de Europa 2023.
El Ayuntamiento de Biar presentó la candidatura de este plátano ubicado en el parque más emblemático de la población por ser un ejemplar singular tanto en sus características como especie como en su vinculación con la historia y las gentes del municipio.
Características e historia
El plátano de Biar es un ejemplar de la especie Platanus Orientalis, que tiene una altura de 26,24 metros, un perímetro de 6 metros de perímetro de tronco, medido a una altura de 1,30 metros de la base y más de 350 años de edad.
El 2 de octubre de 1580, el ayuntamiento acuerda hacer la encadufada (acequia), para traer el agua a la villa. Se construyó la primera fuente abrevadero de Biar. Esta obra no llegó a ejecutarse hasta el 8 de julio de 1618, según consta en el libro racional de dicha fecha.
“Todos los abrevaderos estaban dotados de árboles, aportando unas buenas sombras a las caballerías y ganados durante su abastecimiento. Por ello, deducimos que posiblemente fuese plantado éste árbol junto con otros, los cuales no han perdurado en el tiempo”, según se indica en el catálogo de elementos patrimoniales del Ayuntamiento de Biar.
La primera documentación que hace referencia al presente árbol, considerándolo como un elemento singular, data de 1824.