📸 | Alberto Sáiz/AVAN |
  • La restauración ha sido posible gracias a la Fundación Hortensia Herrero y la rehabilitación del campanario que posibilitó la bajada de los bronces
  • Esta semana se cumplen 80 años de la llegada a la iglesia de sus seis nuevos bronces que sustituían a los desaparecidos en abril de 1937

La Real Iglesia de los Santos Juanes de Valencia recupera, a partir de este viernes, una de sus muchas joyas que también son patrimonio de la Iglesia diocesana y de toda la ciudad: sus campanas, que han sido restauradas, entre ellas, “El Borrego”, la mayor de uso litúrgico de Valencia, con dos toneladas de peso.

El arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, las bendecirá el próximo 27 de diciembre, en la festividad de San Juan Evangelista.

La finalización de la restauración de los bronces y su regreso coincide, además, con una fecha especial: esta semana se cumplen 80 años de la llegada a los Santos Juanes de sus seis campanas nuevas, un 29 de noviembre de 1943, que sustituían a las desaparecidas en abril de 1937. La única original del conjunto que sobrevivió es “El Borrego”, de 1738. 

La intervención general en el templo que se está realizando desde junio de 2021 gracias a la Fundación Hortensia Herrero, “a la que estamos tan agradecidos”, incluía la restauración del campanario, para lo cual era necesario bajar las campanas. “Sin la rehabilitación del campanario y todo el esfuerzo y trabajo realizado por la Fundación, la bajada de las campanas habría sido imposible”, explica Gonzalo Albero, párroco de los Santos Juanes. Ante esa oportunidad, “la comunidad parroquial asumió la restauración de los bronces como un proyecto propio”.

Las siete campanas “han sido trasladadas hoy viernes desde el taller donde han sido restauradas, en Ontinyent, por la empresa Electro Recamp, en un tráiler, hasta la céntrica iglesia de Valencia, y han sido instaladas en el interior del templo, frente a la capilla de Santa Rita, donde estarán expuestas hasta el día de su bendición”.

De esta forma, “durante varias semanas, las personas que quieran podrán verlas de cerca, también a ‘El Borrego’, una de las más importantes de la diócesis, restaurada por primera vez y el resultado emociona. Tras la bendición, cuando pueda ser, serán subidas al campanario”, precisa Vicente Gabarda, presidente de los Campaners de Sant Joan de la Boatella.

La restauración, que se ha prolongado durante un año y ocho meses con un coste de 80.400 euros, “ha sido sufragada por los feligreses y entidades vinculadas a la parroquia -la Hermandad de Sant Joan del Mercat y el Altar Vicentino del Mercat-, a los que agradecemos su colaboración”, destaca Gabarda, que añade que “todavía es necesaria la colaboración económica para poder pagar el montante total”.

Nuevos contrapesos de madera y el reloj arreglado

La parroquia de los Santos Juanes, conocida como ´Sant Joan del Mercat` o ´de la Boatella`, cuenta con siete de campanas, de las que se han restaurado cinco porque dos, ´María` y ´Pere`, fueron restauradas en 2006.

La restauración ha consistido en “la limpieza de los bronces, poner nuevos contrapesos de madera, copia de los originales del siglo XIII, y la puesta en funcionamiento del reloj, a cargo de la Hermandad de Sant Joan del Mercat”.

Los pesos de los bronces son, de menor a mayor: ´Rafaelet` 56 kilos, ´Joanet` 130 kilos, ´Roc` 232 kilos, ´María` 410 kilos, ´Pere` 803 kilos, ´Joanot` 1.272 kilos y ´El Evangelista`, más conocida como ´El Borrego de Sant Joan`, 2.098 kilos. A estos pesos “ahora hay que añadir aproximadamente un 40 por ciento más por los nuevos contrapesos”, señala Gabarda.

Respecto a ´Joanet`, “fue bajada hace tiempo y expuesta en el altar y ahora se queda como un bien parroquial pero sin uso”.

Además, se han fundido dos nuevas campanas: una sufragada por el altar vicentino del Mercat, llamada “Sant Vicent Ferrer”, y otra dedicada a Santa Rita, réplica de la que antiguamente estaba en el exterior, sobre la sacristía, y que fue cedida en 1982 a una ermita de Murla. Esta campana ya está en funcionamiento.

Campanas con mucha historia: fueron lanzadas desde el campanario

El 29 de noviembre de 1943 llegaron a los Santos Juanes de Valencia seis campanas nuevas que sustituían a las desaparecidas en abril de 1937 “después de haber sido lanzadas desde el campanario. En la puerta de la parroquia esperaba la campana mayor, ‘El Borrego’, que fue recuperada milagrosamente en el puerto de Barcelona en septiembre de 1939”, detalla Gabarda.

Así pues, “El Borrego” estuvo en la puerta de la parroquia “durante seis años y 7 meses y ahora, 80 años después, tenemos la oportunidad de poder verla de cerca, junto con las otras campanas que volverán a lo alto del campanario en unas semanas”, indica.

“El Borrego” “es la mayor campana de uso litúrgico de Valencia, como dice una de sus inscripciones. Tiene otras, como la que pone su nombre y otra, en latín, asegura que ´los infiernos huyen rápidamente, se alejan, cuando suena mi metal`”. Además, ha sido tres veces refundida: en 1647; en 1681 por la Real Cofradía de San José; y en 1738 por la propia parroquia, que la dedicó a ´El Evangelista`. 

Tras aparecer en el Puerto de Barcelona en 1939, “en noviembre de ese año el párroco fue a recuperarla con una de las asas para demostrar la propiedad. Lo consiguió y fue trasladada a Valencia en carro, con un coste de 806 pesetas, como consta en el recibo”.

Desde 1996 su toque es “exclusivamente manual” para acompañar las procesiones del Día de la Virgen de los Desamparados y el Corpus, así como para las fiestas de San Juan Evangelista y Bautista.

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