- En la solemnidad del Corpus Christi, que ha presidido en la Catedral de Valencia
El cardenal Cañizares ha señalado que en la misión popular diocesana que está emprendiendo la iglesia en Valencia, “es necesario poner en el centro la eucaristía”, para lograr “una Iglesia que ame y muestre ese amor a los más necesitados”. El arzobispo de Valencia ha presidido en la Catedral de Valencia la misa de pontifical con motivo de la solemnidad del Corpus Christi.
Así, el Arzobispo ha señalado que “necesitamos una Iglesia en la que cada uno de sus miembros tenga en el centro la eucaristía, que participe en la misa dominical y que adore al Santísimo”, porque sólo así tendremos “una Iglesia con proyección misionera, que evangelice y que anuncie la Verdad”.
Además, ha señalado que en la adoración y contemplación de la eucaristía “está el acontecimiento central de la historia del mundo”, algo que Valencia conoce y conserva desde hace siglos y que “quiere reavivar con gran intensidad de fe, tras estos años difíciles por la pandemia”. Una manifestación de fe que tendrá lugar esta tarde en la solemne procesión, con la custodia de la Catedral, una “extraordinaria obra de arte, incomparable y única , hecha con la donación de los pobres después de una guerra, ejemplo de concordia, unidad y amor”, ha señalado
La celebración del Corpus Christi «invita a recordar, avivar, meditar, contemplar y adorar el acto de amor de Jesús a los hombres, que es la única revolución realmente capaz de renovar al mundo”, ha añadido.
Durante su homilía, el Cardenal ha recordado que “debilitar la vida eucarística es debilitar el testimonio de la caridad. Necesitamos un mundo nuevo, de hermanos, de paz, de servicio y de entrega a los demás”.
En este sentido, ha señalado que “no podemos guardarnos la alegría de la fe para nosotros”, es necesario y urgente transmitirla ante “el extraño olvido de Dios que existe hoy en parte del mundo”. Por eso en esta misión diocesana, “todos estamos implicados, a todos se nos convoca a abrir de par en par nuestro corazón a Jesucristo y mostrarlo a los demás.”
La eucaristía, concelebrada por el obispo emérito de Zaragoza monseñor Manuel Ureña y por el cabildo metropolitano, ha contado con la participación de la Coral Catedralicia, bajo la dirección de Luis Garrido.
Tras la misa de pontifical, a mediodía, ha tenido lugar la Cabalgata del Convite, en la que aparecen las tradicionales danzas del Corpus, el ‘capellà de les Roques’, que invita a los presentes a participar en la procesión de la tarde, y la ‘Degollà’, que a su paso por las calles Cabillers y Avellanas, es recibida con el tradicional ‘bany’ a base de pozales de agua.
Esta tarde, a partir de las 19 horas, dará comienzo la procesión eucarística desde la Puerta de los Apóstoles de la Catedral y que recorrerá las calles del centro de la capital valenciana presidida también por el Cardenal.
Este año debido a las obras de la plaza de la Reina, y como ya sucedió en la procesión de la Virgen de los Desamparados, la procesión no pasará por la plaza de la Reina sino que girará por la calle de La Paz en dirección a la calle Luis Vives, y de ahí tras pasar por la calle del Mar, volver ya por la calle Avellanas. En esta ocasión sí que pasará por la calle María Cristina, donde se instalará una rampa, para evitar el desnivel producido tras las obras.
📸 Alberto Sáiz/AVAN |