- Acudirán las Vicarías VII y VIII, que integran las parroquias de la zona de La Ribera y de La Safor-La Valldigna-La Marina, respectivamente
Las Vicarías territoriales VII y VIII de la Archidiócesis realizarán este sábado, 11 de marzo, la peregrinación a la Basílica y a la Catedral con motivo del Año Jubilar del Centenario de la Coronación de la Virgen de los Desamparados y tomarán parte en la misa jubilar presidida por el arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent.
Ésta será la última de las peregrinaciones organizadas por Vicarías territoriales de la Archidiócesis, que comenzaron el pasado mes de febrero. También han tenido lugar las peregrinaciones por movimientos diocesanos, que culminarán el próximo 25 de marzo con la organizada por la delegación de Infancia y Juventud.
La Vicaría VII integra las parroquias de la zona de La Ribera, mientras que la VIII está formada por las parroquias de las comarcas de La Safor, La Valldigna y La Marina.
El sábado por la mañana, después de una concentración en la Plaza de la Virgen con todos los peregrinos, a las 10:45 horas, saldrá de la Basílica la Cruz alzada, en procesión, con el Arzobispo y los sacerdotes. Todos recibirán, en la plaza, a la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados, que saldrá a las 11 horas de la Basílica.
A continuación, irán en procesión desde la Plaza de la Virgen a la Catedral -por la calle del Micalet- y entrarán por la Puerta de los Hierros en la Seo, donde el Arzobispo celebrará la misa a las 11:30 horas.
La colecta de la misa se destinará a la Corona de Caridad del Año Mariano del Centenario, para los proyectos solidarios con los que colabora la Basílica de la Virgen. Una vez termine la peregrinación en la Catedral, los fieles podrán acompañar en romería a la imagen de la Mare de Déu hasta la Plaza de la Almoina.
Objetivo: que no falte nadie este sábado
Luis Joaquín Molina, vicario episcopal responsable de la Vicaría VII, anima a todos los fieles de su territorio a peregrinar este sábado y participar en la misa jubilar convocada por el Arzobispo. “Es un tiempo propicio, en la Cuaresma, para poder ganar la indulgencia y celebrar juntos todo lo que el Señor nos está regalando en este tiempo, y en este Centenario de la Coronación de la Virgen. Esperemos que no falte nadie y que podamos también devolverle, con alegría y gozo, la visita que Ella nos hizo”.
Del mismo modo, Francisco Revert, vicario episcopal de la Vicaría VIII, explica que “María está en medio de nosotros pero no en una actitud pasiva, esperando que vayamos a pedirle. Ella, como Madre, sabe perfectamente nuestros desamparos, sufrimientos y necesidades, por lo tanto, nos mueve a que, con confianza, nos acerquemos a Ella para darle gracias. Por ese motivo, estamos llamados a peregrinar para encontrarnos con Ella este sábado y sentirnos amparados, ahora y siempre”.