• Es la más antigua de las «Mare de Déu trobades» 

El Puig celebrará sus fiestas patronales en honor a Santa María de los Ángeles, este fin de semana y el lunes, con misas solemnes y procesiones -tras dos años sin poder realizarlas- con réplicas de la imagen de la Virgen, la más antigua de las ‘Mare de Déu trobades’ que se conservan en la diócesis de Valencia.

Los actos festivos comenzarán mañana, sábado, con un volteo general de campanas, a las 12 horas, y por la tarde se realizará una ofrenda de flores a la patrona en la iglesia parroquial ubicada en el monasterio de Nuestra Señora de El Puig de Santa María, regido por la Orden de los Mercedarios.

Los principales actos tendrán lugar el domingo y el lunes, días en los que la iglesia del monasterio acogerá la celebración de misas a las 8:30, 12 (solemne) y 19 horas y habrá procesión, los dos días, a las 19:45 horas, ha señalado el párroco de El Puig y religioso mercedario Melchor Azcárate.

El domingo, la misa solemne será oficiada por José Juan Galve, Provincial de la provincia mercedaria de Aragón, y la procesión se hará con la réplica de la imagen de la Mare de Déu realizada tras la Guerra Civil. El lunes la misa la presidirá el párroco, Melchor Azcárate, y procesionará por la tarde la réplica más reciente de la imagen de la patrona, realizada en 2004 con motivo del 50 aniversario de la coronación canónica..

El programa de actos finalizará el martes, 6 de septiembre, con la misa, a las 11 horas, por los difuntos de la Cofradía de la Mare de Déu del Puig.

La más antigua de las ‘Mare de Déu trobades’

La imagen de la patrona de El Puig es la más antigua de las que se conservan de las denominadas ‘Mare de Déu trobades’. Según la tradición, en 1237 San Pedro Nolasco la descubrió en un montículo. Al conocer el hallazgo, Jaume I ordenó construir en su honor el monasterio que hoy se levanta en el lugar que entregó luego a San Pedro Nolasco y sus frailes mercedarios. En el monasterio fue entronizada la imagen de Santa María de los Ángeles de El Puig. Además, Jaume I consideró la protección de la Virgen como causa determinante de la conquista y proclamó a Santa María de El Puig como patrona del Reino.

De estilo bizantino, la imagen muestra a la Virgen con el Niño grabada en una losa de 120 kilos de peso y está en el altar mayor del monasterio de El Puig.